Melodías que acercan a Dios (03/22): Aunque es de noche

Artículo publicado en revista RIE de marzo de 2022.

Aunque es de noche

De nuevo encontré algo súper interesante en el portal Catholic-Link. ¿Rosalía cantando una poesía de san Juan de la Cruz? ¿Era posible? Escuché la canción, quedé impresionado y ¡tenía que hablaros de esta canción! Como no quería copiar ideas, no seguí leyendo aquel artículo sino que me puse a explorar. Mi sensación es la de haber viajado por tres épocas y tres personas. Por eso os lo voy a contar así, como las estaciones de un viaje apasionante. ¡Comenzamos con Rosalía!

Perdonad, pero apenas he escuchado a Rosalía. En principio me va poco su estilo y no pensaba que algún tema suyo encajase en nuestra sección. En cualquier caso es una gran artista como prueban su éxito y los premios recibidos, tantos que me pierdo con la cantidad de Grammys que le han dado. También hay que reconocer el mérito de mezclar flamenco y copla con estilos y recursos modernos.

El tema «Aunque es de noche» no pertenece a ningún álbum. Se lanzó como sencillo antes de su famosísimo «El mal querer» y está más relacionado con el disco anterior porque colabora con el mismo productor, Raúl Refree. Es una versión maravillosa en la que voz, guitarra y palmas transmiten una emoción y una fuerza increíbles.

Pero dejad que, más que en la música, me centre en el video que me parece que aporta mucho. Está rodado como un plano secuencia, es decir, que va todo seguido, sin cortes. Los pocos que hay se superponen a la acción sin interrumpirla. Comienza en el interior de un coche que tiene una recargada y variopinta decoración en la que abundan imágenes religiosas. Entra un conductor del que no vemos nada, más que su oscura ropa. El vehículo se pone en marcha y llega hasta una explanada donde está Rosalía cantando en una silla junto a la entrada de un recinto. Antes de este momento la hemos visto dentro de aquel lugar en un par de fogonazos. La cámara sale del coche y el foco pasa a ella mientras sigue cantando con gran expresividad corporal.

En la explanada permanece el coche, con las luces encendidas, y vemos un camino limitado por las luces de unas velas que llevan al interior del recinto, donde se encuentra lo que parece una capilla. Allí entrará Rosalía hacia el final y descubriremos que se trataba de la capilla de un cementerio. Durante todo el vídeo unos trazos superpuestos a la imagen refuerzan algunos detalles o movimientos, es especialmente llamativo cuando los trazos resaltan el crucifijo del coche y aparece escrito «REDENTOR».

Una paraíta con Morente
Prefiero la versión de Enrique Morente, quizá por el mayor protagonismo de la guitarra o por el estilo más clásico o por ser la original. No sé. Pero aunque os guste más la de Rosalía merece la pena hacer una parada en este cantaor granaíno. Desde que llegué a él por esta canción estoy escuchando mucho a este grandísimo maestro.

Encontramos esta canción en su disco «Cruz y Luna» de 1983 junto a otra más sobre letra de san Juan de la Cruz y otras dos con letra de Al-Mu’tamid, rey de la taifa de Sevilla. El tema religioso está presente en otros de sus trabajos hasta el punto de tener entre ellos una «Misa flamenca». En ella Morente canta el «Kyrie Eleison» (Señor, ten piedad) más emocionante que he escuchado en mi vida, aunque si lo queréis aún más impresionante buscad la interpretación para «Campanas por el poeta».

Volviendo a «Aunque es de noche», se me quedan cortas las palabras para describirla. Empieza la guitarra, primero con una introducción y luego con una melodía recurrente. La parte de la guitarra me encanta, pero la voz… tenéis que oírla.

La letra, idéntica a la de Rosalía, actualiza expresiones demasiado antiguas del texto original pero por lo demás lo mantiene casi igual, lo que nos lleva a la última parada de este viaje.

Fuente de Juan de la Cruz, final de trayecto… o principio
Juan de Yepes, el religioso y poeta del siglo XVI al que conocemos como san Juan de la Cruz, es el autor de este precioso texto. Pero el título original no es la repetida frase «Aunque es de noche» sino una descripción: «Cantar del alma que se huelga [se alegra] de conocer a Dios por la fe». En este cantar el santo usa dos símbolos muy potentes: el agua y la noche.

El agua y, más aún, el agua que mana y corre, nos hace pensar en vida, frescor, naturaleza, alivio. Son tantas las referencias al agua que encontramos en la Biblia que no sabría cual dejaros. Me quedaré con un par de ellas del Antiguo Testamento: «Sacaréis aguas con gozo de las fuentes de la Salvación» (Is 12,3) y la profecía de Ezequiel (Ez 47) en la que una corriente de agua sale del templo saneando y dando vida allá por donde llega. Y estas dos del Nuevo: «El último día, el más solemne de la fiesta, Jesús en pie gritó: “El que tenga sed, que venga a mí y beba. El que cree en mí”; como dice la Escritura: “de sus entrañas manarán ríos de agua viva”» (Jn 7,37-38); «Y quien tenga sed, que venga. Y quien quiera, que tome el agua de la vida gratuitamente» (Ap 22,17b).

Así que tenemos una fuente, no se puede conocer de dónde procede su agua pero sí el escondido lugar por donde mana. Su agua es origen de todo; es claridad, belleza, abundancia. Llama a todas las criaturas y puede saciar la sed de todo el que acuda. Y en las últimas estrofas nos revela que está escondida «en este vivo pan por darme vida». ¡Ah! ¡Qué bien sé yo la fuente!, podemos decir también nosotros. Es Jesús, en la Eucaristía, ¿verdad?

Noche es no ver las cosas con claridad, es el tiempo de las dudas, del miedo a peligros reales o imaginados… de noche pasan cosas buenas, pero parecen inseguras hasta la mañana y, cuando lo que pasa es malo, nos parece mucho peor.

¿No os pasa a vosotros que hay veces que os sentís como si fuese de noche? puede entrar el sol por mi ventana pero miedos, inseguridades, dudas o problemas hacen que para mí sea de noche. A veces clareando, como cuando falta poco para que salga el sol, pero otras una noche oscura, cerrada y sin luna.

Encontramos en un salmo: «Tenía fe, aun cuando dije “qué desgraciado soy”». Creo que comparte tema con este «Cantar del alma»: mantener la fe en la noche y así recibir de Dios vida, fuerza y alegría. Y es lo que os pido hoy: acudid a la fuente y seguid siendo felices… aunque es de noche.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s